Cuenta la leyenda que hace mucho mucho tiempo vivió en la vieja casona una joven, nadie recuerda su aspecto, ni su nombre siquiera, pero todos saben su historia.
Una noche fría de otoño durante la celebración de una enorme fiesta, la muchacha entró en el salón. Serpientes y escorpiones disfrazados de elegantes damas y caballeros con ricas máscaras cubriendo sus asquerosos rostros, danzaban al son de una melodiosa música, las risas se mezclaban con las notas, el oro del champán competía con el dorado de las lámparas, interés e hipocresía cubiertos de seda y encaje paseaban fastuosos sobre las ricas alfombras persas.
Haciendo caso omiso de su raído traje de lana gris, se dirigió hacia el centro de la estancia con la vista clavada en el dueño de la casa. Unos iris suplicantes avanzaron hacia otros que destilaban tristeza, pero cuando casi estaba a su lado, él se dio la vuelta mostrándole la ancha espalda.
Un extraño crujido resonó entre los alegres compases, mas nadie lo oyó. Bajando la mirada abandonó el festín, subió a su cuarto y tomó la ajada capa envolviendo con ella las viejas cicatrices junto con las nuevas heridas y partió.
Dicen que la vieron cruzar el puente y adentrarse en el bosque hasta que la niebla la engulló, otros que la devoraron las fieras, algunos que murió de melancolía escondida en un rincón, pero todos afirman que en las noches de otoño una extraña dama de sombrío ropaje, regresa a la casona en busca de los pedazos del corazón que dejó esparcido entre sus muros.
Cerró el libro, acarició la exquisita cubierta de piel repasando con cuidado el título grabado en áureas letras y lo dejó en el sofá. A pesar del fuego que crepitaba en la chimenea el frío seguía en él. Con paso cansado se dirigió a la ventana, apoyó la mano sobre el cristal y oteó el horizonte. Allá a lo lejos con el cabello agitado por el viento, unos ojos tristes se clavaron en los suyos preñados de soledad.
2 comentarios:
Uy me encanto está historia , les mando un beso y se me cuidan
Mariola: Me alegra mucho que te guste Citu, un beso grandote para ti también.
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